Anibal Molina, en 1967 iniciaba sus estudios sobre Agronomía, entusiasta y conquistador, en una época de escasos recursos tecnológicos, invirtió su tiempo, dinero y conocimiento para escribir una historia de emprendedorismo y pasión por los desafíos del medio ambiente, en los años 70, período turbulento políticamente , Anibal inicia su jornada de profunda investigación.

Fundador de la Comisión de investigación Bragadense de Soja (CIBS) en 1972, sus trabajos técnicos (estudios agroclimáticos, fenológicos, plantación intercalada entre trigo y soja, cebada y soja, canola y soja, etc.) sirvieron de base para la diseminación de la cultura de la soja En Buenos Aires.

Durante su trayectoria, trabajó durante cinco años, también como fotográfico exclusivo de Monsanto.

Acumuló experiencias, realizando conferencias totalmente ilustradas, utilizando imágenes que están en sus libros, algunas otras de su acervo y videos.

En sus conocimientos están: La identificación y biología de los insectos, los benéficos y los perjudiciales, todos los que están presentes en los plantíos de la soja, maíz, en el cuidado del suelo, en los cultivos también del trigo, cebada, canola y algodón, este último, generó Un capítulo especial.

Anibal siempre puntualiza que el conocimiento del género y la especie, en todas sus etapas biológicas, nos permiten saber exactamente cómo controlar insectos perjudiciales en diferentes cultivos.

En las Malezas, siempre ha trabajado con fotos en todas sus etapas, semillas, mudas y reproducción, permitiendo un control excepcional y una ayuda muy grande para las Empresas de estos sectores.

Volviendo al algodón, Aníbal, empezó a observar que el cambio climático podría ser útil, durante siete años realizó investigaciones y se profundizó en el tema, en su propio campo experimental.

Hoy, la producción de algodón en Argentina, también se extiende a una parte de la provincia de Buenos Aires, ubicada más al sur del área de plantación tradicional, debido al cambio climático de los últimos años que ha pasado en esta región.

La investigación fue realizada en el municipio de Bragado, ubicada en la Provincia de Buenos Aires, lugar donde nunca había sido plantado algodón.

El período sin heladas, aumentó y pasó 160 días, entre los años 1903/1938 para cerca de 190 días, en los últimos años y el aumento de la temperatura durante el mismo período, con semanas enteras de 27 a 37 grados celsius, fueron factores decisivos En la expansión de este cultivo

En el período de investigación, el cultivo del algodón, cumplió totalmente el ciclo reproductivo y vegetativo, aunque fue expuesto a la helada, a veces, al final de su ciclo.

Lo que nos permite, después de 7 años de estudios, concluir que está zona está perfectamente lista para el cultivo de un algodón sostenible, ecológicamente correcto.

Con la fibra obtenida, fueron producidas, prendas de vestir de alta calidad, complementando toda la cadena de producción.

Para cualquiera de los temas abordados en este texto, sean Algodón, Malezas o Insectos en los Cultivos, estamos listos para dar cualquier tipo de consultoría tanto en la producción o en la diseminación del conocimiento.